Os comparto otro Cómic Personalizado, hoy como un regalo celebrando una muy próxima boda.
No me canso de decirlo: ilustrar cómics a medida, no es sólo un trabajo gratificante en lo artístico o económico.
En el caso de hoy, tengo que reconocer que cuando me enviaron el «guión» de la obra, tuve que leerlo varias veces. La historia es, cuanto menos, curiosa, pero ¿no has pensado cuántas de esas anécdotas que hacen especial tu relación de pareja son de lo más insólitas?
Pocas veces me lo he pasado tan bien como cuando toca dibujar elementos de esos, «que sólo entiendes junto a tu pareja» y que desde fuera parecen de lo más raros. Esos momentos, anécdotas, elementos (llámalos como quieras) son las especias que dan color a una relación que ya sabes, va a ser eterna.
Busca esos elementos, créetelos y dales toda la fuerza del mundo. Y si crees no tenerlos, créalos.
Por eso, cuando tuve que dibujar tejones, topos, monedas de dos euros y un par de superhéroes, lo tuve claro: esta pareja mola.
¡Feliz boda, amigos! Yo os dejo por aquí, como siempre, el típico «Cómo se hizo» y el resultado final, en este caso impreso a tamaño A2, sobre cartón pluma de tipo Pegasus.
Recuerda que si quieres un cómic personalizado como este, o una caricatura / ilustración personalizada, puedes contactar conmigo aquí.
Y aquí podéis ver el resultado final 🙂
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No dudes en contactar conmigo.
Mucha gente busca un regalo distinto y piensa en una caricatura (bien como dibujo enmarcado/impreso en lienzo, bien como tarjeta sobre la que “echar unas firmas” acompañando al regalo principal).
Lo que está claro es que no debe ser “la típica caricatura” en la que se ensalzan en exceso los defectos (ya sabes, cuando aparecemos dibujados con grandes cabezones e inflados), que muchas veces no terminan de gustar, ya que a veces resultan incluso visualmente violentas (curioso, pero mucha gente me lo dice).
Por eso al final recurren a un estilo más cómic (desenfadado y divertido): caricatura personalizada, donde el objetivo (la gracia del asunto) nos lo encontramos en el escenario utilizado y personajes (alguna situación vivida a la que se la tenga cariño, una frase, manía o afición que repita siempre, como el caso de la ilustración de hoy): La sonrisa está asegurada.
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